La Cruz de Borgoña o Aspa de Borgoña es una representación de la Cruz de San Andrés en la que los troncos que forman la cruz aparecen con sus nudos en los lugares donde se cortaron las ramas. Por ser San Andrés el patrón de Borgoña, la Cruz de Borgoña era el emblema utilizado por las tropas de Juan Sin Miedo en la guerra de los Cien Años. Tras casarse María de Borgoña con Maximiliano I de Habsburgo Será en el siglo XVI cuando aparezca uno de los elementos más importantes en la historia de la bandera de España. En el año 1496 la infanta Juana de Castilla se casa con el Archiduque de Austria, Felipe el Hermoso. Este enlace matrimonial se enmarca dentro de las alianzas entre las familias de los Habsburgo y los Trastámaras Como son las Aspas de Borgoña (más concretamente, la cruz de San Andrés ya había sido utilizada por algunas milicias en el norte de España), que será el elemento principal de las banderas españolas durante más de dos siglos. Esta divisa era propia del Archiduque Felipe y gradualmente pasaría por extensión de algunas unidades militares como los arqueros de Borgoña a todo el ejército español. Durante el reinado de Carlos I de la casa de Austria y al no existir todavía el concepto moderno de bandera nacional (el verdadero símbolo nacional era el escudo real) las unidades militares llevan su propia bandera particular, siendo elemento común en muchos casos las Aspas de Borgoña. La Cruz de Borgoña ha sido incluida en los escudos de armas y en las banderas de España, tanto de tierra como de mar, desde 1506, época de su introducción con la Guardia Borgoñona de Felipe el Hermoso. Aunque desapareció del Escudo de Armas del Rey de España en el reinado de Felipe VI y de su estandarte, muchas banderas, guiones y estandartes actuales del Ejército español siguen presentando este emblema en ellos. Un claro ejemplo lo constituyen los guiones y estandartes de la Guardia Real. La Cruz de Borgoña es el origen del distintivo de cola que marca las colas de los aviones del Ejército del Aire de España, y de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra. En tierra, esta bandera, blanca con la cruz de Borgoña en rojo, ondeó quizá por primera vez como insignia española en la batalla de Pavía en 1525 (aunque las aspas rojas eran lisas, sin nudos), y es la más característica de las utilizadas por los tercios españoles y regimientos de infantería de la Monarquía hispánica durante los siglos XVI, XVII, XVIII y comienzos del XIX.